De pequeña yo he hecho decenas de estas pulseritas, pero no tenía ni idea de que se llamaban así hasta que lo vi en una película americana. En España últimamente no se ve mucha afición de los niños por hacerlas, me imagino que esto es así porque se venden en casi todos los mercadillos, bazares… por apenas unos euros, y con ello no compensa gastarse el dinero de los hilos (que son caros) y el tiempo de confeccionarlas.
Igual esto ahora cambia con la presentación por DMC de una máquina para realizarlas
Además ofrecen un link a una web en la que se recogen los diferentes modelos que se pueden realizar ¡yo no tenía ni idea de que estaban clasificados y con nombres propios!
Con la cercanía de San Valentín podría ser un regalo muy original para los niños y sus amigos.